Ayer que fui a comer a casa de mis papás me topé con la novedad de que tienen una rata de inquilina. No un ratoncito traviesillo, NO. Una rata tamaño capibara, insolente, baquetona, chola, del más bajo pero bajísimo nivel.
La muy cabrona se trepó al frutero y mordisqueó la piña, la papaya, las papas y los plátanos. Y el pendejo de Pillo en vez de cazarla, se queda por horas olfateando curiosamente abajo de la estufa y abajo de la lavavajillas (que al parecer es donde se esconde).
El pedo con esas pinches ratas es que uno ya sabe de antemano que son muy listas. Si les pones una trampa seguro se tragarán la carnada y saldrán ilesas, y si les pones una trampa de pegolina son tan grandes que seguro se irán con todo y la trampa pegada. brrrr hasta escalofríos me dan... qué bueno que ya no vivo ahí...
Pillo con su mohicana y su collar de picos, se ve muy rudo pero no se dejen engañar, es más cobarde que Scooby Doo.
3 comments:
mis jefes tenían una chihuahueña que se llamaba Mini (hace poco colgó los tenis, es la antecesora de la Rudy), era rebuena para cazar ratas y ratones, una vez sí se dio un tiro con una ratota de esas que hasta brincan para atacar pero se la peló, yo le ayudé dando un escobazo pero sí se la rifó la Mini. Luego se ponía a cazar iguanas y jugaba con ellas, las perseguía y las agarraba con el hocico y luego las zangoloteaba hasta que dejaban de moverse, la soltaba y se esparaba a ver si se volvía a mover, para volver a agarrarla y darle una zangoloteaba hasta que las mataba. Eran como sus juguetes y la neta las mataba por diversión.
(O_O) yo quiero que Pillo sea así!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!
jajajaja así era Donna, que aunque todo mundo se burlaba porque ya estaba senil y parecía animatronic, hasta tlacuaches mataba la condenada
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