Es impresionante lo que los carbohidratos hacen en el cuerpo de uno.
Fíjense ustedes que yo solía ser una muchachita esquelética, y las morras me criticaban (bleh pura envidia), y las tías y tíos me decían que no era sano estar tan flaca, pero what the hell, a mí me gustaba.
Y quién sabe qué sucede con la edad, o con los estados de ánimo... mire Ud., yo solía tener lots of issues que interferían directamente con mi apetito y en general con mi aparato digestivo; hubo momentos en los que de plano no toleraba ni una quesadilla porque me ponía enferma durísimamente. Y luego, como que ese tipo de depresiones adolescentoidas terminaron, y la comida me entraba pocamadre. Además, me han dicho por ahí (y aclaro que esto lo digo sin fundamento científico whatsoever) que hasta equis edad todavía funciona la hormona del crecimiento entonces no engordas, y ya después dejas de producir dicha hormona y el cuerpo cambia aunque comas exactamente lo mismo.
Bueno, pues imaginen que de pesar 49 en mis peores días de azote puberto, y 52 en mis mejores momentos de atleta (jojojojo), en estos últimos meses la báscula llegó al terrible 57, y no solo eso sino que la ropa que toooda mi vida me había quedado bien ahora me quedaba "apretadita" y con lonjas laterales botadas, HUH?!?!?!?!?!?!?! no no no no no, esto no es normal. Había que tomar medidas drásticas al respecto.
Con nutriólogos no me gusta ir porque una vez fui y me puso una dieta CERO práctica, así de "3/4 de taza de alubias", o "1 licuado con nopal y toronja". O sea las típicas cosas que a) no te gustan, b) no se antojan c) tienes que andar midiendo por tazas.
Bueno entonces a mi mejor entender, lo que te jode en realidad es comer tanto pinche pan, bolillo aquí, chilaquiles allá, tacos los domingos, dogos el viernes pa la peda, 3 tortillitas en cada comida, 1 sandwich de cenar (que al cabo que es integral y ni engorda), etc. Y decidí eliminar los carbohidratos de mi dieta en la mayor medida posible.
Así, pues, el desayuno consta de proteina y fruta (yogur -así lo llama la RAE, a mí no me vean feo-, manzana, claras de huevo con salchicha y sin aceite), la comida consta de más proteina con verduras (pollo o atún con lechuga, zanahoria, jitomate, aceite de oliva y vinagre balsámico) y la cena consta de maaaasss proteína (2 rollitos de jamón).
Y qué creeeennnnnnnnnnnnnnn:
2 kilos en 9 días. A huevo. Sólo espero que en no más de 1 mes logre deshacerme de los 3 kilos que me faltan.
Fíjense ustedes que yo solía ser una muchachita esquelética, y las morras me criticaban (bleh pura envidia), y las tías y tíos me decían que no era sano estar tan flaca, pero what the hell, a mí me gustaba.
Y quién sabe qué sucede con la edad, o con los estados de ánimo... mire Ud., yo solía tener lots of issues que interferían directamente con mi apetito y en general con mi aparato digestivo; hubo momentos en los que de plano no toleraba ni una quesadilla porque me ponía enferma durísimamente. Y luego, como que ese tipo de depresiones adolescentoidas terminaron, y la comida me entraba pocamadre. Además, me han dicho por ahí (y aclaro que esto lo digo sin fundamento científico whatsoever) que hasta equis edad todavía funciona la hormona del crecimiento entonces no engordas, y ya después dejas de producir dicha hormona y el cuerpo cambia aunque comas exactamente lo mismo.
Bueno, pues imaginen que de pesar 49 en mis peores días de azote puberto, y 52 en mis mejores momentos de atleta (jojojojo), en estos últimos meses la báscula llegó al terrible 57, y no solo eso sino que la ropa que toooda mi vida me había quedado bien ahora me quedaba "apretadita" y con lonjas laterales botadas, HUH?!?!?!?!?!?!?! no no no no no, esto no es normal. Había que tomar medidas drásticas al respecto.
Con nutriólogos no me gusta ir porque una vez fui y me puso una dieta CERO práctica, así de "3/4 de taza de alubias", o "1 licuado con nopal y toronja". O sea las típicas cosas que a) no te gustan, b) no se antojan c) tienes que andar midiendo por tazas.
Bueno entonces a mi mejor entender, lo que te jode en realidad es comer tanto pinche pan, bolillo aquí, chilaquiles allá, tacos los domingos, dogos el viernes pa la peda, 3 tortillitas en cada comida, 1 sandwich de cenar (que al cabo que es integral y ni engorda), etc. Y decidí eliminar los carbohidratos de mi dieta en la mayor medida posible.
Así, pues, el desayuno consta de proteina y fruta (yogur -así lo llama la RAE, a mí no me vean feo-, manzana, claras de huevo con salchicha y sin aceite), la comida consta de más proteina con verduras (pollo o atún con lechuga, zanahoria, jitomate, aceite de oliva y vinagre balsámico) y la cena consta de maaaasss proteína (2 rollitos de jamón).
Y qué creeeennnnnnnnnnnnnnn:
2 kilos en 9 días. A huevo. Sólo espero que en no más de 1 mes logre deshacerme de los 3 kilos que me faltan.
1 comment:
mmmmm, yo no sé mucho de estas cosas la neta, pero a mí siempre me han enseñado que eliminar los carbohidratos es muy pero muy peligroso, lo que sí se puede eliminar son las calorías vacías como son los carbohidratos de harinas refinadas, azúcar, etc. O sease, en vez de empacarte medio kilo de tortilla puedes chingarte una taza de avena, cosas así, pero bueno repito: no sé mucho de estas cosas.
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